Cómo se materializa un sueño a través de la fe?

• DESEOS: Qué quieres?, escríbelo con detalle. Ej. Quieres es una casa: Cómo la quieres, en dónde la quieres, que tamaño, con jardín, que tipo de acabados, etc. escribe, acompaña de promesas, pásalos por los filtros (porqué quiero esto? para qué quiero lo que quiero?, es necesario?

  
  

• DELEITE: Medita, enfócate en lo primordial en tu vida, has tu parte y no te estreses por lo que no puedes ni te corresponde hacer.

  
  

• DO IT (Hazlo): Define qué estás dispuesto hacer, a sacrificar para conseguir ese sueño, necesitas reorganizar tu vida? Revisar tus hábitos? Aprender alguna nueva habilidad?, trabajar un poco mas sin descuidar lo primordial en la vida…. Qué estás dispuesto hacer?

  
  

• DEFÍNELO: En qué tiempo te propones alcanzar ese sueño? Define qué es lo que a ti te corresponde hacer, ej. Voy a separar un fondo de ahorro, voy a gastar menos en comidas fuera, voy hacer ejercicio 3 días a la semana, voy a mejorar mi alimentación, etc. y deja en manos de Dios lo que tu no puedes hacer.

  
  

• DESCANSA: No te afanes, todo llega en su momento, acuéstate en paz, agradece y antes de dormir mira - sueña como si ya tienes ó has recibido ese anhelo.

  
  

• DECLARA: Que las oraciones sean acciones de declaración por lo recibido, aunque aun no lo tengas materialmente….esto es fe. Escribe un enunciado en donde esté manifestado tus anhelos, el tiempo, las promesas que lo respaldan y lo que estás dispuesto hacer para conseguirlo.

  
  

• DI GRACIAS: La gratitud marca la diferencia, ser grato produce un estado de realización, levanta el ánimo, trae liberación y sanidad.

  
  

• DISFRUTALO: Alégrate con lo que has recibido, testifícalo, no sientas culpabilidad (mucha gente, por su mala programación mental y espiritual, se siente mal cuando le llegan bendiciones a su vida, especialmente materiales).

  
  

• COMPARTE: Todo lo que pides es para compartir, para bendecir a otros, para unir a otras personas a tus logros, para desafiar también la fe de los demás.

Deléitate en el Señor y El te concederá las peticiones de tu corazón. Sal. 37: 4

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